Por diferentes razones desde pequeño me he sentido diferente. Muchas veces solo.
Ya desde muy pequeño empezaron a fascinarme las cuestiones sociales. Parece que me tomaba muy a pecho lo que yo consideraba 'injusticias' con compañer@s del cole, familia...
Y tras la visita con el 'cole' a la escuela de educación ambiental 'Don Bosco' empecé a fantasear en casa con una especie de grupo ecologista que protegía la Naturaleza. Tendría unos 12 años.
En esa edad yo era un chaval más, del montón, bastante introvertido. En todo caso, ya contaba con el input de una madre pasional e inteligente, un padre autodidacta y con una vida muy 'make it your self', un abuelo materno sabio, el amor incondicional de una abuela paterna y una infinita biblioteca, al menos para un chaval de esa edad, por el trabajo editorial de mi padre.
1997-Ese año supuso un punto de inflexión en mi vida.
Entre otras cosas, todo cambió cuando una religiosa de Jesús-María, Adela Menacho, a la que siempre querré con devoción y con la que siempre estaré en deuda, me ofreció ser monitor de lo que allí llamaban Grupos de amistad. Ya nada sería igual en mi vida.
Ese ofrecimiento, que acepté ruborizado, fue uno de los mejores regalos que he recibido.
La acción que posiblemente ha marcado toda mi vida posterior. Gracias Adela.
Ese ofrecimiento supuso una confianza en mí, inédita. Se fijó en mí, alguien en quien no se había fijado nadie. Y allí sentí y pude empezar a transmitir y comunicar, toda una primavera, toda una energía que llevaba dentro y que había estado enclaustrada desde la noche de mis tiempos.
Seguramente pude empezar a ser yo.
Y ahí es donde creo que empezó mi vida pública y política. En la educación no formal. Allí donde hoy lucho por desarrollar mi compromiso y mi vida laboral. Porque como ya se ha dicho muchas veces, la educación es política, no política partidista claro, pero sí política como la ayuda al educando para alcanzar su autonomía, desarrollar su sentido crítico, sus conocimientos, etc. En definitiva educación política para ser capaz de participar en la vida de la polis, de la ciudad, para alcanzar entre tod@s los ciudadanos una vida justa y lo más feliz posible.
Obviamente, entonces no me planteaba todo esto en esos términos, pero sí que de alguna manera ya llevaba implícitos todos esos sueños de un mundo mejor.
Fue pasando el tiempo, las experiencias, las personas que han marcado mi historia, las organizaciones y mis sueños, mi idea del mundo mejor con el que soñaba fueron dibujándose con trazos más finos, hasta el día de hoy, donde sigue cristalizando esa idea.
Siempre una constante, el fuego tremendo que ardía en mi interior de otra realidad más justa y a los pocos años, más verde.
Creo que es curioso, bucear en mi historia para hayar el origen de estos ardientes deseos.
En el caso de un mundo más justo ¿La soledad de mi infancia por mi carácter introvertido o quizá porque ya no me encajaban cosas del exterior?
En cuanto a la Naturaleza ¿La serie de Yaki y Nuca?
En todo caso, nótese la influencia que sobre una persona pueden tener decisiones o obras de nuestra vida que nunca llegamos a descubrir.
Otra persona que me marcó, Laura Álvarez, me dijo que 'Todo da fruto' y así lo sigo creyendo hoy en día. Creo que por los lazos invisibles de la vida, por los que todo está entretegido y conectado, acciones positivas generan consecuencias positivas.
Por mucho que no seamos capaces de verlo o comprenderlo.
Me gusta mucho pensar así.
(Menudas confesiones. Quería una entrada cortita, directa, pero menuda parrafada me está saliendo. Lo siento, me estoy saltando todas las reglas de un blog exitoso pero por lo menos me sirve como terapia)
Y es que toda mi vida más o menos me he sentido remando contra corriente y esto en ocasiones me ha producido profundos desajustes. Pero además de en momentos sueltos, hubo unos años en mi vida, que intenté olvidar mi llamada interior, llevar la vida de la masa. Son los años de los que más intento redimirme, y que más me avergüenzan. Pido perdón desde aquí, a todas las víctimas de mi actitud errante de esos años de 'living la vida loca'. Como todo, también tuvo sus cosas buenas.
Y es que una noche de pascua en Becerril de la Sierra con Laura Álvarez, descubrí que cuando has comprendido ciertas claves de la vida y esa llamada interior te ha atrapado hasta cierto punto, ya no hay vuelta atrás. A partir de ese momento todo es ansia de un mundo mejor, de amor verdadero?
Descubrí que felicidad y paz interior eran dos cosas diferentes y que a falta de la primera que por favor, siempre me quedase la segunda. La coherencia se convirtió en concepto basal de mi diccionario personal.
El comienzo de la madurez me trajo la Universidad, profesores/as, nuevos conocimientos, el síndicato en el que estuve de representante de alumn@s y mi querida, muy querida Comunidad crítica. Un grupo de cuatro compañer@s de afinidad intelectual con los que criticamos el mundo heredado que rechazábamos, con l@s que imaginamos y soñamos el mundo que queríamos.
Y más tarde llegó Actio, la empresa de educación no formal, y conocí al tiempo a Josevi Casañs, otra tremenda persona que ha acabado marcando profundamente el rumbo de mi vida, haciendo que virara nuevamente hacia lo ambiental.
Tantas personas me han salvado y a tantas les debo lo mejor de mi vida...
Surgieron las grandes manifestaciones por una vivienda digna y mi llamada interior de nuevo me hizo moverme, me hizo buscar en aquella expresión social, conocí la Plataforma por una Vivienda Digna.
Paralelamente de la mano de Josevi conocí Greenpeace como educador y me uní como activista a Marfull Acció Ecologista Agró.
Y creo que tras todo este rollo-preámbulo es el momento de responder a la pregunta de la entrada ¿Por qué soy activista?
Pues porque siento una llama que me consume, que me pide a gritos un mundo mejor, porque creo con todo mi ser, con toda mi alma que nuestra sociedad se podría organizar mejor para evitar parte de nuestro enorme sufrimiento humano y vital.
Creo nuestra ignorancia nos ciega, y que hay soluciones al alcance de nuestra rutina para hacernos vibrar, solo hace falta que alguien nos las acerque con una sonrisa, de forma inteligente y atractiva.
Me encanta la comunicación y creo que todo es ponerse para cambiar cosas.
Pero soy consciente de los obstáculos que lastran nuestras metas.
Y más con el paso de los años. Pero mi ilusión en vez de menguar o extinguirse ha crecido como la más valiente y desafiante de las formas vegetales y sobre todo, he acabado descubriendo la respuesta a mi pregunta:
Soy activista porque lo necesito, por estrategia vital, porque lo hago por mí, por terapia mental y espiritual. Es un posicionamiento ante la vida.
Para mí, luchar es vivir. Y no quiero morir.
una vez más,gracias por tus palabras que son caricias para el corazón :)
ResponderEliminar(por si te interesa,un libro inspirador de un grán médico espiritual sobre la íntima relación de la felicidad y paz interna con la ausencia de enfermedad y sufrimiento:"Cúrese usted mismo"(Doctor Edward Bach).
Nos vemos en las estrellas :)
Muchas gracias Sonia!!! Nos vemos en las estrellas!!
ResponderEliminarEmotivo cuanto menos. Pocas personas tienen tan claro la razón de vivir. Con esta biografía entre otras muchas acciones, creo que tú también estás convirtiéndote para muchas personas eb una persona "de referencia" como todas esas que mencionas. Sinceramente, no creo que tú necesites terapia. Más bien aquellos que te leemos.
ResponderEliminarJuli!!
EliminarPreciosas palabras, y viniendo de ti un honor. Muchas gracias por el comentario.
Tú para mí, siempre serás un referente. Ganas de verte y charrar!! ;)
Un fuerte abrazo
Felicidades por, exteriorizar terapeuticamente, tu inquitud ante el mundo.
ResponderEliminarYa has madurado y te has posicionado ergido y firme ante los avatares de la existencialida humana...en este nuestro mundo!!.
Toca seguir experimentando con que teclas suena mejor la melodia de tu paso por la tierra, y en ese ejercicio, comprobar lo ecleptica que suenan las melodias de tus congeres.
Hemos heredado un planeta politica y ecologicamente en peligro de extincion, poco cercano a los mundos civilizados descritos en tantas novelas de ciencia ficcion...La melodia que nos toca recitar, efectivamente, es la lucha!! Let go!!! dont stop!
Hola Anónimo!
EliminarMuchísimas gracias por tu comentario!
Seguimos!!
Un fuerte abrazo,